Simfonieta

Obsessió lunar, canción número 10 de aquel ciclo, da el tema que encontramos entre los compases 1 y 18 del segundo movimiento. A partir de este motivo se construye toda la Simfonieta y más concretamente de la célula que va del compás 2 a la tercera parte del compás 3 del mismo movimiento. Su elaboración se lleva a cabo por el procedimiento de inversión, aumentación, deformación rítmica, etc. El primer tiempo, con transformaciones más elaboradas, nos recuerda menos el tema original; y el segundo expone la canción entera creciendo luego con un desarrollo contrapuntístico para volver al clima inicial en el compás 39, finalizando con una pequeña coda a partir del compás 45.
Toda la obra es de estilo neoclásico, y los dos últimos movimientos lo son, además en la forma y en la definición: III. Minuetto y IV. Rondó.

Miquel Ortega